Con la guerra la actividad productiva en el canton de Kobane ha quedado
parada. El sector agrícola no pudo sembrar el trigo este año. Han
habido muchos incendios en las tierras de labranza debido a los
proyectiles disparados durante los combates. Las YPG, cuando avanzan,
tienen a veces que quemar previamente los campos para hacer estallar las
minas que el Daesh siembra en su retirada. También puede que algunos
se deban a descuidos, y cada día se ven campos arder en la lejanía.
Desde el ministerio de economía se financia al sector agrícola el 50% del precio del combustible, que con la guerra se ha multiplicado por 20. Desde el ministerio se controlan tambien los precios en el comercio. La propiedad de la tierra en Kobane es tradicionalmente masculina, y desde el Ministerio de la mujer se han propuesto legislar contra esta situacion.
Actualmente hay escasez de todo en Kobane. En el mercado uno encuentra fundamentalmente tomates, pepinos, cebolla, berenjenas, patatas y huevos, muchos o casi todos estos productos vienen de Turquía. Hay una fabrica de pan que abastece a casi toda la población. No se tira ni un pedazo de pan. En las casas se cocina para todo el mundo y se espera a estar juntas para comer. La comida es la misma un día tras otro.
Tras la salida del gobierno de Damasco, el autogobierno obtenía algunos ingresos grabando algunas actividades comerciales importantes, pero estas han desaparecido con la guerra. Actualmente el presupuesto viene de otros cantones, de los municipios de Bakur (Kurdistán turco) y de las comunidades kurdas en Europa y EEUU.
La actividad política se centra ahora en la reconstrucción de la ciudad y pueblos y las infraestructuras de agua y electricidad. El problema de las minas y explosivos sin estallar llevará tiempo, y actualmente dificulta por ejemplo los trabajos para la reactivación de la fabrica de cemento y de la planta eléctrica que debería suministrarle energia. La red eléctrica del canton se alimentaba con una presa en el rio Eufrates, ahora bajo control del Daesh (ISIS) de modo que el suministro esta cortado y al caer la noche en Kobane rumorean los generadores. Con la inminente comunicación por tierra con el cantón de Jazeera las condiciones de la población mejorarán.
@annafrank4
Foto: Eleya Sidi. Del ministerio de economía.
Desde el ministerio de economía se financia al sector agrícola el 50% del precio del combustible, que con la guerra se ha multiplicado por 20. Desde el ministerio se controlan tambien los precios en el comercio. La propiedad de la tierra en Kobane es tradicionalmente masculina, y desde el Ministerio de la mujer se han propuesto legislar contra esta situacion.
Actualmente hay escasez de todo en Kobane. En el mercado uno encuentra fundamentalmente tomates, pepinos, cebolla, berenjenas, patatas y huevos, muchos o casi todos estos productos vienen de Turquía. Hay una fabrica de pan que abastece a casi toda la población. No se tira ni un pedazo de pan. En las casas se cocina para todo el mundo y se espera a estar juntas para comer. La comida es la misma un día tras otro.
Tras la salida del gobierno de Damasco, el autogobierno obtenía algunos ingresos grabando algunas actividades comerciales importantes, pero estas han desaparecido con la guerra. Actualmente el presupuesto viene de otros cantones, de los municipios de Bakur (Kurdistán turco) y de las comunidades kurdas en Europa y EEUU.
La actividad política se centra ahora en la reconstrucción de la ciudad y pueblos y las infraestructuras de agua y electricidad. El problema de las minas y explosivos sin estallar llevará tiempo, y actualmente dificulta por ejemplo los trabajos para la reactivación de la fabrica de cemento y de la planta eléctrica que debería suministrarle energia. La red eléctrica del canton se alimentaba con una presa en el rio Eufrates, ahora bajo control del Daesh (ISIS) de modo que el suministro esta cortado y al caer la noche en Kobane rumorean los generadores. Con la inminente comunicación por tierra con el cantón de Jazeera las condiciones de la población mejorarán.
@annafrank4
Foto: Eleya Sidi. Del ministerio de economía.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada