El portavoz de las Yekîneyên Parastinê Gel (Unidades de Defensa Popular, YPG) en el cantón de la autonomía democrática de Efrîn, Firat Xelil, ha respondido a la agresión turca donde, por el momento, habrían muerto dos miembros de su milicia cerca de Azaz. También hay varios heridos de los aliados árabes de Jaish al Thuwar (Ejército de los revolucionarios) según el propio Xelil.
Jaish al Thuwar denunció en un comunicado, ayer, el ataque turco contra sus posiciones. El comandante kurdo ha asegurado que el objetivo de Ankara es detener el avance de la oposición democrática siria, de Jaish al Thuwar, sobre posiciones que hasta ahora mantenía la oposición islamista, títere turca, al norte de Alepo.
Xelil ha recordado que "en cuatro años no hemos disparado ni una sola bala contra la parte turca de la frontera". De este modo ha negado la mentira turca de que existió un ataque previo desde Siria. Según Xelil es normal que el estado turco se sienta "incómodo y preocupado con el progreso en el área de Azaz por parte de Jaish al Thuwar", el gobierno de Erdogan ha volcado una enorme cantidad de recursos para apoyar a los opositores islamistas y ahora observa como sus líneas de defensa hacen agua, han perdido el corredor hasta Alepo y, de hecho, comienzan a perder la guerra.
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