Al menos desde principios de los años 90, y el resurgimiento del
movimiento kurdo la fiesta de Newroz, recibió una nueva connotacion
política. Volviendo a la mitología de la fortaleza quemada de Dohuk es
el encendido del fuego como un símbolo para la exclusión de toda
tiranía. Después de los últimos años del proceso de paz este Newroz
estaba de nuevo bajo el signo de represión ...
La noche antes de Newroz pasamos juntxs con muchxs compañerxs de todo el
Kurdistán. Se bailó en forma conjunta en una gran sala, se intercambió y
se durmió.
Durante la noche, occurió una gran asamblea plenaria, en la que nos
presentamos. Hemos dicho que entendemos las luchas por la liberación y
una vida libre del poder, como luchas comunes, vinculadas. Continuamente, queremos
mostrar solidaridad y participar en las festividades del Newroz. Además
queremos informar sobre la situación en el norte de Kurdistán y
aprender mucho del movimiento en el lugar.
La reacción de lxs amigxs fue muy poderosa y motivadora. Dijeron que les
dio fuerza en especial en estos tiempos dificiles: recibir amigxs internacionales que vengan aquí
y crean que sus ideas puedan seguir existiendo y funcionando es muy positivo. No es el
tiempo para llorar, sino para luchar. Luego leyeron la llamada a la
juventud y el resumen de las cartas escritas desde el año 2003 por Abdulah Ocalan
antes de Newroz.
Con lxs amigxs, con lxs que pasamos la noche juntos, fuimos en la mañana
siguiente a la calle. Cada año, una manifestación de jóvenes sigue a
las festividades del Newroz, incluído éste. Después de un corto
período de tiempo nos acompañaron los Acrips (varios vehículos policiales turcos
blindados) en la manifestación e intentaron provocar, repetidamente, mediante conducción de los vhículos en el interior de la manifestación. La manifestación no se
dejó provocar y siguió marchando en voz alta. Muchos de los autobuses
que pasaban tenían carteles con la inscripción Newroz Piroz be (feliz newroz) en el visor óptico,
coches tocado el claxon y fuera de las casas se escuchaban declacaraciones
de solidaridad, incluso desde lxs más pequeñxs de las ventanas.
Frente al terreno del festival nos esperaba una presencia
policial enorme que contribuía claramente a intimidar y evitar las
celebraciones. Es absolutamente claro lo que el estado turco quería lograr : Una vez más quería impedir violentamente a la gente vivir
su cultura. La celebración en Amed fue una de las pocas permitidas. Sin
embargo, se nos informó que alrededor de 40 000 personas, que habían
viajado por todo el Kurdistán por los trenes o automóviles, fueron
enviadas de vuelta.
Dos semanas antes de Newroz, por razones de seguridad, el terreno
del festival se aseguró y valló por parte de nuestrxs camaradxs de todo
Bakur. No había ni stand, ni papeleras sin control y en todo el terreno
estuvieron compañerxs, que aseguraron la zona para minimizar el riesgo
de otro ataque.
De camino al festival la policía ha erigió dos puertas de control de
una distancia de unos pocos cientos de metros. De forma absolutamente arbitraria
fueron retiradas toallas legales en las puertas de control para las
mujeres por los agentes de policía de sexo masculino. Incluso
por llevar un botiquín de primeros auxilios conllevó a múltiples controles por parte la policía. Durante el control de los hombres* se
recrudeció la situación sin razón aparente. Las personas alrededor fueron
atacadas con porras a través de la entrada, Akreps y cañones de agua
fueron lanzados sin motivo.
Una vez en la fiesta, el terreno se llenó lentamente con cerca de un
millón de personas. Muchxs bailaron y cantaron juntxs, no
importó si se sabía o no. Hubo muchos discursos en el escenario: Gülten Kisanak, Sirri Süreya Önder, Selahattin Demirtas y muchxs
otrxs. Impresionante fue el contacto y el intercambio amistoso entre el
pueblo y el ambiente de ánimo eufórico. A diferencia de los eventos
políticos, culturales en Alemania, nadie estaba bebiendo alcohol allí y
todxs son consideradxs en conjunto.
A medida que el fuego de Newroz fue iluminado, todo el mundo se puso de
pie y cantó junto Cerxa Sorese (El funcionamiento de la Revolución).
Algunxs lanzaron ropa al fuego, con la idea de que cuando algo viejo
se quema, puede surgir algo nuevo. En varias ocasiones, los jóvenes
corrieron en voz alta, con fuerza, con muchas banderas a través de la
multitud y fueron aclamadxs por todos lxs visitantes.
Cuando se vació lentamente la fiesta de Newroz, los últimxs visitantes
fueron atacadxs al salir del local por la policía con granadas de gas
lacrimógeno.
A pesar del riesgo los ataques terroristas y la represión permanente, la
gente no se dejó intimidar. Este año se ha demostrado por el
movimiento kurdo, de nuevo, que no importa lo que el estado turco hace,
no puede parar la fuerza del movimiento.
Newroz pîroz be!
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada