Horas después de anunciar una prórroga de tres meses (a partir del día 19 de octubre) del estado de emergencia, Turquía ha suspendió 12.801 agentes de policía en el día de hoy martes, diciendo que habían sospechado enlaces al clérigo basada en EE.UU. Fetullah Gülen. Dicho religioso es a quien Erdogan acusa de orquestar fallido golpe de estado del 15 de julio.
En un comunicado, la sede de la policía nacional de Turquía dijo que 2.523 de los suspendidos eranjefes de policía. El número total representa más del 5 % de toda la fuerza policial de Turquía. "Han sido evaluados para tener comunicaciones o enlaces a la red de Gülen, identificada como una amenaza a la seguridad nacional", dijo el comunicado de la policía. Turquía muestra el movimiento religioso dirigido por Gülen como una red ilícita, aunque este ha negado tener cualquier vínculo con el levantamiento.
El presidente Tayyip Erdogan ha tomado medidas sin precedentes para librar a las instituciones del estado del personal enemigos desleales o potenciales que se consideren desde el intento de golpe de Estado . Alrededor de 100.000 personas en el ejército, la administración pública, la policía, el poder judicial y las universidades han sido despedidos o suspendidos de sus puestos de trabajo y 32.000 personas han sido detenidas.
Los poderes de emergencia permiten Erdogan eficazmente a gobernar por decreto. Sus decisiones no están sujetas a la supervisión de la Corte Constitucional, máxima autoridad legal de Turquía. Erdogan ha sugerido el estado de emergencia podría durar más de un año.
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