Desde ayer diferentes "opinadores" intentan "vender" la tesis de que la determinación de Países Bajos frente al gobierno turco beneficia, a Erdogan y a Wilders. El primero se vería reforzado ante el referéndum del 16 de abril. El segundo, dirigente del PVV (Partido de la Libertad) ante las elecciones de la próxima semana. Cualquier opinión es objetiva, ni cierta ni falsa pero afirmar que Erdogan o Wilders se veran beneficiados es una conjetura. Sin argumentos conlleva una falsa neutralidad ante unos hechos que no pueden dejar neutrales.
Erdogan es un asesino. Ganará el referéndum realziado tras purgar decenas de miles de personas tras el "golpe" de juliol. Lo que le beneficia es la OHAL, ley de excepción, que rige desde entonces y regirá durante el referéndum, Lo que beneficia a Erdogan son las visitas genuflexas de Merkel. La recepción del 9 de marzo en Msocú por parte de Putin afirmando que trabajaran "codo a codo". La recepción entre alfombras del gobierno español al ministro turco. Los 6.000 millones de € regalados por la Unión Europea. Eñl silencio de los que ahora dicen que, un acto de dignidad holandés, beneficia al sádico islamista. El silencio cuando ha invadido Siria. La impunidad ante los miles de asesinatos de kurdos/as de los últimos meses. El silencio ante los 157 periodistas encarcelados. Dejar hacer proselitismo a Erdogan y su cohorte es lo que le beneficia. Pararles los pies. Decir basta es lo que le perjudica. Erdogan ha jugado a fono la carta del silencio europeo. Quien calla otorga y Erdogan ha mostrado que dicho silencio era, es, la validación a sus políticas.
Menos aún beneficia a Geert Wilders. En primer lugar por que su ascenso electoral es inevitable. El PVV ha crecido más que ningún otro partido con su discurso anti-islàmico. Wilders ha denunciado los excesos de Erdogan. Dejar que sea solo él quien defienda la democracia en Turquía frente a la deriva autoritaria de Erdogan es abonarle la victoria. Países Bajos es un estado ejemplar. Frente al consumo de drogas, responsabilidad individual, el trato de animales, la eutanasia.... es un estado de libertades. Dejar solo a Wilders defender las libertades en Turquía mientras el resto miran a otro lado es beneficiarle. Lo que hico ayer el primer ministro Mark Rutter fue quitarle el discurso a Widlers, un discurso crítico con la intervención del gobierno turco en Holanda, donde viven de 300.000 a 400.000 turcos. Donde Erdogan obtuvo un 70 %. El Erdogan que encarcela diputados/as, abogados/as, sindicalistas, kurdos/as e invade Siria o Irak. Callar le beneficia. Decir basta no.
Erdogan es un asesino. Ganará el referéndum realziado tras purgar decenas de miles de personas tras el "golpe" de juliol. Lo que le beneficia es la OHAL, ley de excepción, que rige desde entonces y regirá durante el referéndum, Lo que beneficia a Erdogan son las visitas genuflexas de Merkel. La recepción del 9 de marzo en Msocú por parte de Putin afirmando que trabajaran "codo a codo". La recepción entre alfombras del gobierno español al ministro turco. Los 6.000 millones de € regalados por la Unión Europea. Eñl silencio de los que ahora dicen que, un acto de dignidad holandés, beneficia al sádico islamista. El silencio cuando ha invadido Siria. La impunidad ante los miles de asesinatos de kurdos/as de los últimos meses. El silencio ante los 157 periodistas encarcelados. Dejar hacer proselitismo a Erdogan y su cohorte es lo que le beneficia. Pararles los pies. Decir basta es lo que le perjudica. Erdogan ha jugado a fono la carta del silencio europeo. Quien calla otorga y Erdogan ha mostrado que dicho silencio era, es, la validación a sus políticas.
Menos aún beneficia a Geert Wilders. En primer lugar por que su ascenso electoral es inevitable. El PVV ha crecido más que ningún otro partido con su discurso anti-islàmico. Wilders ha denunciado los excesos de Erdogan. Dejar que sea solo él quien defienda la democracia en Turquía frente a la deriva autoritaria de Erdogan es abonarle la victoria. Países Bajos es un estado ejemplar. Frente al consumo de drogas, responsabilidad individual, el trato de animales, la eutanasia.... es un estado de libertades. Dejar solo a Wilders defender las libertades en Turquía mientras el resto miran a otro lado es beneficiarle. Lo que hico ayer el primer ministro Mark Rutter fue quitarle el discurso a Widlers, un discurso crítico con la intervención del gobierno turco en Holanda, donde viven de 300.000 a 400.000 turcos. Donde Erdogan obtuvo un 70 %. El Erdogan que encarcela diputados/as, abogados/as, sindicalistas, kurdos/as e invade Siria o Irak. Callar le beneficia. Decir basta no.
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